Después de degustar tantas recetas de comidas, quizás he ganado unos kilitos rebeldes; una buena manera de bajarlos es realizar caminatas escuchando el sonido del mar. La mañana es para mi el mejor horario para realizarlas, ya que las playas se encuentran todavía con unos pocos afortunados. Aquellos que fueron optimistas luego de un día nublado y se levantaron temprano para disfrutar de la majestuosidad del mar tuvieron su recompensa.
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